Las pérgolas con plantas de glicina son una hermosa decoración natural para tu jardín. La glicina, también conocida como Wisteria sinensis, es una planta trepadora que produce racimos largos y colgantes de flores en tonos de púrpura, rosa, blanco o azul.
Concejos para construir una pérgola con plantas de glicina
A continuación te dejamos algunos concejos para construir pérgolas con plantas de glicina:
- Las plantas de glicina necesitan mucho sol para crecer y florecer, por lo que debes elegir una ubicación que reciba al menos 6 horas de sol al día. Además, debes asegurarte de que la pérgola esté bien anclada y sea resistente para soportar el peso de la vid trepadora.
- Las plantas de glicina prefieren un suelo bien drenado y rico en nutrientes. Antes de plantar la glicina, debes cavar un agujero lo suficientemente grande para la planta y mezclar el suelo con compost o abono orgánico.
- Planta la glicina en la base de la pérgola, a 30 cm de distancia del poste. Asegúrate de plantarla en un lugar donde tenga suficiente espacio para extenderse y trepar.
- Las plantas de glicina pueden crecer de forma desordenada, por lo que debes dirigir su crecimiento hacia la estructura de la pérgola. Para ello, puedes utilizar alambres o cuerdas para guiar las ramas de la glicina hacia la dirección deseada.
- A medida que la glicina crece, puede ser necesario proporcionar soporte adicional para evitar que la estructura de la pérgola se dañe. Puedes utilizar listones o vigas adicionales para ayudar a sostener el peso de la vid trepadora.
- Es importante realizar la poda de la glicina de forma regular para mantener su forma y tamaño. La poda se realiza mejor después de la floración, cuando se pueden eliminar las ramas viejas y enfermas.
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